Dentro de su caja incluye los accesorios necesarios para poder instalarse en superficie mediante una lira o bien a través de una pinza de sujeción, que hace de Wech un producto movible y reubicable en cualquier espacio.

Gracias a su pinza, esta lámpara portátil proporciona un sinfín de aplicaciones y posibilidades, podemos encontrarlo en espacios más técnicos donde se requiere una iluminación puntual para realizar una acción concreta, como en el montaje de un cuadro eléctrico, en la reparación de un coche o en la instalación de un toldo de pared, así como en ambientes más recreativos, como zonas de camping o acampada, para aportar luz cuándo oscurece.